Ayer tuvimos la reunión de la empresa, ya sabéis, lo buenos que hemos sido y lo buenos que seremos.
Me he dejado engañar y voy a dar por sinceros los propositos que nos han planteado. Como traca final, hemos hecho un ejercicio para demostrar la importancia del trabajo en equipo, etc, etc.
No se si lo habéis visto antes o lo conocéis pero el ejercicio consistía en tocar unos tambores siguendo el ritmo marcado por un maestro de ceremonias.
Realmente no sirve de mucho pero desde luego es complicado que se te olvide. Juan Mateo era la persona que impartía el curso-ejercicio y desde luego me ha parecido un "monstruo" en lo suyo y, con diferencia, lo mejor del encuentro.
Me ha sorprendido que nadie lo haya destacado cuando en 10 minutos escasos ha sabido hacerse con el auditorio.
Un sobresaliente para él.
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Consulting Demons
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